Informe Pisa
INFORME PISA
El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos de la OCDE, tiene como objeto evaluar el nivel educativo de los alumnos que se encuentran cercanos al final de la etapa obligatoria y comprobar si han adquirido los conocimientos y habilidades necesarios para la participación plena en la sociedad del saber. PISA refleja los países que han alcanzado un buen rendimiento y un reparto equitativo de oportunidades de aprendizaje, ayudando a establecer metas ambiciosas para otros países.
Tras analizar diversos artículos en clase, nos planteamos la siguiente cuestión: ¿Qué evalúa realmente Pisa?. A continuación, veremos distintos puntos de vista sobre dicho informe:
Endreas Schleicher, considera que Pisa es un instrumento positivo, puesto que trata de informar sobre las distintas realidades y su objetivo es extraer información para diseñar políticas educativas eficaces. Además, pretende ayudar a los gobiernos a entender cómo otros países obtienen buenos resultados y sus políticas educativas. De este modo, la diversidad sería una fuente de inspiración para posibles cambios y mejoras. Sin embargo al analizarlo, el autor reconoce que el informe presenta una serie de aspectos cuestionables: en primer lugar, evalúa la capacidad de utilización del saber en distintas materias (lectura, matemáticas y ciencias) pero hay otras que no tiene en cuenta; en segundo lugar, la manera de evaluar es la misma para todos los alumnos y este aspecto puede ser negativo, puesto que cada alumno es diferente y si no entienden las cuestiones, no podrán demostrar su conocimiento; por último, no refleja que España está por encima en algunos aspectos, como por ejemplo, en equidad con respecto a Francia o Alemania.
Santos Guerra en su artículo ¿Viene Pisa del verbo pisar?, destaca que Pisa es un arma para comparar de manera competitiva el nivel de los distintos países, pero desde la perspectiva de que el más fuerte pisa a los más débiles. Además, realiza una crítica a los aspectos medidos por el informe, ya que tiene en cuenta los resultados pero no los procesos y afirma que es posible que se manipule la información o se seleccionen los alumnos con la finalidad de obtener mejores resultados. Finalmente, expone que no es posible comparar los resultados obtenidos porque las culturas y la educación de los sujetos evaluados es muy distinta.
El artículo que realiza un análisis de Finlandia, refleja que la educación en este país es un pilar fundamental y los docentes tienen gran prestigio. Otro aspecto importante, es que las familias se involucran enormemente en la educación de sus hijos, participando y colaborando en las actividades escolares.
Por último el documento de Comprensión lectora, considera que Pisa no tiene en cuenta el bilingüismo y este factor puede afectar indirectamente en los resultados. Al no utilizar la lengua materna puede que no se midan realmente el nivel del alumnado. Por este motivo, los alumnos inmigrantes no suelen realizar este informe, pues sus resultados bajarían las puntuaciones generales.
A modo de conclusión, podemos decir que Pisa puede ser un buen instrumento para analizar el sistema educativo de los países que están obteniendo mejores resultados y orientar nuestra intervención en esa dirección. Aunque en la actualidad parece que los resultados sólo sirven para comparar a los países y crear cierta competitividad, en vez de mostrar claramente los resultados y ofrecer guías y apoyos a los países que se encuentran a la cola del informe.
Además, creemos que aunque los resultados son importantes no hay que olvidar los procesos y habría que valorar también aspectos que van más allá de lo académico. El hecho de que solo se tengan en cuenta los resultados explica que los países "eliminen" a los alumnos que pueden bajar las puntuaciones generales, cuando se supone que todos los alumnos, sea cual sea su rendimiento académico, tienen derecho a una educación de calidad y parece que en este informe son alumnos de segunda. Así, las preguntas deberían de adaptarse a los alumnos, pues son muchos los que no entienden las preguntas o no se realizan en su lengua materna. Por otro lado, creemos importante que la manera de evaluar se adaptase a la realidad en la que se encuentran los alumnos, por ejemplo, que la lectura se realizase en libros digitales y no en libros impresos y se tuviesen en cuenta otras competencias hasta el momento no contempladas, ya que la escuela no solo se ha de encargar de dar conocimientos, sino que también ha de preparar para la vida.